La Influencia De Los Padres
LA INFLUENCIA DE LOS PADRES
Colaboración Especial
Dr. Alejandro Oviedo
Samuel se crió a los pies del sacerdote Elí. Cuando éste murió a la edad de 98 años, Samuel ya era profeta de Dios, es más, él se convirtió en juez de Israel. Pasó el tiempo y Samuel siendo anciano, puso a sus hijos como jueces de Israel, pero ellos no siguieron el ejemplo de su padre. Más bien, se dejaron llevar por la avaricia, aceptando sobornos y pervirtiendo la justicia. Así que, la injusticia oprimía al pueblo de Israel a tal punto que los ancianos pidieron un rey para que los gobernara. Esta es la razón por la que en la historia de Israel aparecen los reyes, por la injusticia con la que los hijos de Samuel gobernaban al pueblo. 1 Samuel 8:1-5.No cabe duda que la influencia que los padres ejercen sobre los hijos es trascendental. Elí fue un gran sacerdote de Israel,pero en la tarea de ser padre, no tuvo éxito.
Samuel, quien fue criado por el mismo sacerdote Elí, fue un gran juez y profeta pero en la tarea de ser padre, no tuvo mucho éxito.
Estos dos casos demuestran que el hecho de estar ejerciendo el ministerio o el trabajo, no es suficiente para asegurar que nuestros hijos serán buenos. El orar a Dios diciéndole "ocúpate de mis hijos que yo me ocupo de tu obra o de mi profesión u oficio", no tiene validez.
Usted y yo podemos estar metidos de cabeza en el ministerio (empresa o profesión) pero eso no nos exime de la responsabilidad de ser buenos padres.
La iglesia del primer siglo tenía entre los requisitos para nombrar obispos lo siguiente: "Debe gobernar bien su casa y hacer que sus hijos le obedezcan con el debido respeto; porque el que no sabe gobernar su propia familia, ¿cómo podrá cuidar de la iglesia de Dios?" 1 Timoteo 3:4-5. NVI.
Para Dios no es negociable el valor de la familia, Él desea que tengamos éxito en nuestros hogares como en el ejercicio de nuestro ministerio o trabajo.
De la vida de Samuel y Elí yo aprendo algo importante, se descubre que se ha tenido éxito o se ha fracasado como padre hasta que los hijos están grandes, cuando demuestran sus convicciones o los valores que sustentan sus vidas.
CÓMO SE HACE? Hoy podemos marcar un antes y un después en nuestra forma de criar a nuestros hijos. Tome su agenda y en la fecha de hoy escriba con sus propias palabras un compromiso con Dios, de esforzarse por mejorar su influencia sobre sus hijos (as). A manera de sugerencia podría escribir algo como esto: "Señor, hoy decido hacer un compromiso contigo, pues no estoy satisfecho con la influencia que he ejercido sobre mis hijos, me comprometo a ser un mejor padre (madre). Me voy a esforzar para que mis hijos te amen y que sean capaces de mantener sus convicciones cristianas."
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